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La influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica productiva en español

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La influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre

la segmentación silábica productiva en español

Tjerk Nagel (s1774433)

Trabajo Final del Máster de Lingüística Europea

Tutores: Dr. R. de Jonge & Dr. D. Gilbers

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2 Abstract

The present paper investigates the influence that phonemic order and lexical stress have on the syllabic segmentation of the Spanish language. By investigating the influence of these two factors on the degree to which the duration of a vowel and that of a neighboring consonant correlate in speech, the effect of the two factors on the productive syllabic segmentation has been determined. The analyses show that, even though the effects of lexical stress are significant, the same result has not been found for phonic order. In addition, the results of lexical stress suggest that phonic order surpasses lexical stress regarding its influence on the syllabic segmentation of the Spanish language.

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3 Índice

0. Introducción 4

1. El marco teórico 5

1.1 La sílaba y su importancia como unidad fonológica 5

1.2 Teorías silábicas 8

1.3 Principios y factores subyacentes 9

1.4 Discusión de los desarrollos 16

2. El propósito 18

3. Corpus y metodología 20

4. Los análisis 22

4.1 Las variables y el método analítico 22

4.2 La posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada 23

4.3 La tonicidad de la vocal focalizada 26

4.4 La tonicidad de la vocal opuesta 27

5. Discusión 29

6. Conclusión 32

7. Bibliografía 34

8. Apéndices 36

8.1 Los vídeos fuentes del corpus 36

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4 0. Introducción

Ya desde hace muchos años, la unidad de la sílaba se ha utilizado para segmentar el lenguaje y la segmentación silábica ha sido el tema de muchos estudios en varios campos diferentes dentro de la lingüística. A menudo, los datos de los estudios están basados en el resultado del proceso de la silabificación subjetiva del lenguaje. Aunque los participantes a los experimentos de silabificación en general están de acuerdo en el número de sílabas que contiene una palabra o una frase, a veces están en desacuerdo sobre la segmentación silábica exacta. Todavía no parece haber un consenso sobre los principios y los factores que rijan la segmentación silábica. Por esta razón, en el presente trabajo se pretende averiguar cuál es la influencia de dos factores diferentes sobre la segmentación silábica en español. Los dos factores que se investigarán son el orden fonémico y el acento léxico.

La influencia de los factores del orden fonémico y del acento léxico se pretende averiguar a través de la investigación del efecto de tres variables sobre la medida en la que una vocal y una consonante contigua están en correlación con respecto a su duración en el habla. Si se encuentra un efecto significativo de las tres variables con la dirección correcta, se podrá confirmar la tendencia de los dos factores que se ha observado tradicionalmente en los experimentos de silabificación y demostrar la presencia de huellas de la segmentación silábica en el aspecto acústico de la duración.

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5 1. El marco teórico

En esta parte se examinarán los estudios más importantes con respecto al tema de la segmentación silábica del lenguaje. Primero, se discutirá la sílaba y su importancia como unidad fonológica. Después, se tratarán las primeras teorías silábicas que se desarrollaron en los años 1970 y, a continuación, los estudios que han investigado los principios y los factores que rigen la segmentación silábica. Finalmente, se discutirán los desarrollos que han ocurrido a través de los años con respecto a la investigación de la segmentación silábica.

1.1 La sílaba y su importancia como unidad fonológica

Según el Diccionario de la Lengua Española (Real Academia Española, 2001), la sílaba se define como “sonido o sonidos articulados que constituyen un solo núcleo fónico entre dos depresiones sucesivas de la emisión de voz”. Según la mayoría de los investigadores del tema, este núcleo fónico consiste en dos partes principales. La primera parte es la posición del ataque, aunque su realización es opcional. La segunda parte es la rima, que es la parte más fundamental, porque contiene el núcleo silábico obligatorio. Además, contiene una coda opcional. El núcleo de la sílaba en español siempre es una vocal (Hachén, 2002: 4). El ataque y la rima, cuando no están vacíos, están formados por una o múltiples consonantes. La secuencia que se considera la estructura silábica universal es la de CV, porque es el tipo de sílaba más frecuente1. Con respecto al límite entre dos sílabas, la idea más establecida es que se encuentra exactamente entre la coda de una sílaba y el ataque de la siguiente. Sin embargo, no todos los investigadores están de acuerdo con esta perspectiva, como Content, Kearns y Frauenfelder (2001), que proponen que el final de una sílaba no necesariamente coincide con el principio de la siguiente y que puede ocurrir después de él.

La estructura interna de la sílaba no es el único aspecto que ha suscitado preguntas. La posición de la sílaba misma como unidad fundamental dentro de la fonología no siempre ha estado segura. Una de las primeras personas que intentó justificar el reconocimiento formal de la sílaba como unidad fonológica fue Hooper (1972). En su artículo, Hooper pretende demostrar que no se puede describir adecuadamente la fonología del español sin considerar la posición que tienen los segmentos dentro de una sílaba. Uno de sus argumentos más fuertes a favor de la relevancia de la sílaba está basado en el hecho de que /l/ en al hielo se palataliza mientras que /l/ en aliento no se palataliza. Hooper explica la diferencia por medio de la inserción del símbolo de un límite silábico $

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6 en las cadenas fónicas: [αλ$jԑlᴐ], [α$ljԑntᴐ]. Según Hooper, la asimilación de /l/ a /λ/ sólo ocurre cuando interviene un límite silábico. Por tanto, la unidad fonológica de la sílaba es esencial para poder explicar este fenómeno.

Una de las primeras investigaciones cuantitativas apuntadas a averiguar la importancia de la sílaba fue llevada a cabo por Klapp (1971). Con tres experimentos quería investigar si el número de sílabas necesarias para la pronunciación inglesa de un estímulo numérico afecta el tiempo de reacción de los participantes en varias condiciones diferentes. Para el primer experimento, se han comparado los tiempos de reacción a estímulos numéricos con pronunciaciones de dos, de tres y de cuatro sílabas. Para la primera parte del experimento, los participantes tenían que leer cada número en voz alta en el momento en el que apareció. Para la segunda parte, tenían que leer el número en voz alta en el momento de una señal que se dio dos segundos después de la aparición del estímulo. Para la tercera parte, los participantes tenían que indicar si dos números eran los mismos o si eran diferentes. Finalmente, para la cuarta parte tenían que indicar si dos números eran los mismos o si eran diferentes en el momento de la señal. Los datos del primer experimento de Klapp están reproducidos en la tabla 1:

Tabla 1. Los tiempos de reacción en milisegundos a estímulos numéricos con pronunciaciones de dos, tres y cuatro sílabas para la lección inmediata (R-IMM), la lección después de la señal (R-SIG), la indicación inmediata de mismos versus diferentes (S/D-IMM) y la indicación de mismos versus diferentes después de la señal (S/D-SIG).

Response Latencies for Experiment 1

Cond. Syllables to pronounce 2 3 4 R-IMM 503 522 536 520 R-SIG 391 398 391 393 S/D-IMM 645 662 678 662 S/D-SIG 341 337 340 339

Note. – Latencies are given in milliseconds

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7 las condiciones SIG. En segundo lugar, el efecto de las condiciones R versus S/D sobre los tiempos de reacción no es significativo. El último y más importante resultado es que el efecto del número de sílabas sobre el tiempo de reacción es significativo. Esto parece indicar que hay un proceso de habla implícito que está relacionado con la comprensión de los números. Esta misma sospecha es confirmada por el segundo y el tercer experimento, donde se encontraron resultados parecidos. Además, el efecto significativo del número de sílabas necesarias para la pronunciación de los estímulos fue una de las primeras manifestaciones de la importancia de la sílaba como unidad fonológica en una investigación cuantitativa.

Otra investigación del papel que tiene la sílaba en la segmentación perceptual de palabras fue llevada a cabo por Mehler, Dommergues, Frauenfelder y Segui (1981). Los datos de su primer experimento consisten en el tiempo que necesitan los participantes para encontrar una secuencia CV o CVC dentro de una serie de dos hasta cinco palabras disílabas francesas en la que la secuencia se encuentra dentro de una sílaba CV o CVC2. Los resultados del experimento se muestran en la figura 1:

Figura 1. El tiempo medio en milisegundos que se necesita para detectar una secuencia CV y una CVC en una sílaba CV y una CVC.

Del análisis de los datos resulta que la interacción entre el tipo de secuencia meta y el tipo de sílaba con respecto al tiempo de reacción medio es significativa. Esto significa que una secuencia meta se detecta más rápidamente cuando corresponde a una sílaba en una palabra que cuando no

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8 corresponde a una sílaba. Por ejemplo, cuando se presentan las dos palabras francesas balance y balcon, la secuencia ba se encuentra más rápidamente en la primera mientras que bal se detecta más rápidamente en la última. La conclusión más importante que sacan los investigadores es que las dos palabras de tal pareja difieren con respecto a la manera de la que se procesan y que por eso debe haber propiedades acústicas en la señal que los participantes utilizan para segmentar las palabras.

1.2 Teorías silábicas

En los años 1970, se presentaron las primeras teorías apuntadas a ofrecer un conjunto de reglas para determinar la correcta segmentación del lenguaje en secuencias silábicas. De aquí en adelante, a estas teorías se referirá como teorías silábicas. Una de las primeras teorías silábicas fue desarrollada por Hoard (1971). Hoard entró en una discusión sobre las reglas con respecto a la tensión y la asimilación de las consonantes en el inglés, que se había comenzado en The sound pattern of English de Chomsky y Halle (1968). Para poder resolver los problemas que encontró a la hora de establecer estas reglas, Hoard propuso tres reglas para la división silábica. Primero, propuso dos reglas que exigen que todas las palabras y todos los afijos se coloquen entre límites silábicos. La tercera regla exige que se inserte un límite silábico directamente delante de cada vocal átona o segmento silábico. Además, exige que, cuando una vocal es tónica, este límite se adelante tanto como permitan las reglas de los grupos consonánticos, así que las sílabas tónicas contengan el máximo número posible de consonantes en su ataque.

Una teoría silábica más elaborada fue presentada por Hooper (1972). Así como Hoard, la teoría de Hooper organiza el posicionamiento de límites silábicos entre todas las vocales. Sin embargo, el paso siguiente es muy diferente: la teoría exige que, cuando sólo hay una consonante entre dos vocales, el límite sea puesto delante de la consonante. Cuando hay dos o más consonantes y una de ellas es una consonante obstruyente que no sea /s/ seguida por una líquida, el límite silábico se pone delante de la obstruyente. Cuando la segunda consonante es aproximante, el límite se pone delante de la primera consonante. En todas las otras situaciones, el límite silábico se pone entre las dos consonantes.

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9 en una consonante y la siguiente empieza con una vocal: en este caso el límite silábico se mueve delante de la consonante.

No todas las teorías silábicas se basan completamente en los aspectos fonológicos de la lengua. La teoría de Taft (1979) toma en cuenta unas reglas con respecto a la ortografía del inglés, las que denomina las reglas ortotácticas. Estas reglas dicen que cuando una combinación de letras no es posible al principio de una palabra en forma escrita, tampoco es posible al principio de una sílaba y cuando no es posible al final de una palabra, tampoco es posible al final de una sílaba. En base a estas reglas, formula el principio siguiente: incluye en la primera sílaba todas las consonantes que sigan la primera sílaba de la palabra y que permitan las reglas ortotácticas sin interrumpir la estructura morfológica de la palabra. Un ejemplo que presenta para demostrar el funcionamiento del principio es UNCLE, que se silabifica como UNC LE porque NC no viola ninguna regla ortotáctica, mientras que NCL sí viola una regla ortotáctica. Por otra parte, la condición que protege la estructura morfológica es necesaria en el caso de una palabra como TEAPOT, así que se silabifique como TEA POT y la relación morfológica entre TEAPOT y TEA se mantenga. La sílaba resultante del principio Taft la denomina “Basic Orthographic Syllabic Structure”, o BOSS en abreviatura.

1.3 Principios y factores subyacentes

Como se puede observar en la sección 1.2, las teorías silábicas desarrolladas en los años 1970 en gran parte se basaban en los conocimientos establecidos con respecto a las restricciones morfológicas y fonológicas a la unidad de la palabra. Las teorías a menudo eran orientadas a cubrir estas restricciones con una máxima exhaustividad y una mínima complejidad. Sin embargo, desde los años 1980 aumentó el número de investigaciones cuantitativas centradas en la segmentación silábica. Visto que el problema de la segmentación silábica aparentemente era demasiado complicado para resolverlo con una sola teoría basada principalmente en las restricciones a las palabras, los investigadores empezaron a intentar revelar otros principios y factores que rigieran la segmentación silábica, generalmente sin el propósito de formular una teoría silábica completa.

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10 ataque de la sílaba. Este máximo número de consonantes depende de las reglas fonotácticas de la lengua en cuestión. (3) El tercer principio es el principio de la tonicidad de las vocales y dice que una vocal tónica atrae el máximo número posible de consonantes tanto al ataque como a la coda de la sílaba. (4) Finalmente, el cuarto principio es el principio de ambisilabicidad, que consiste en la idea de que determinadas consonantes intervocálicas, como /l/, pertenecen a dos sílabas simultáneamente. Según Fallows, las teorías silábicas combinan los cuatro principios de diferentes maneras y solamente el primer principio se puede combinar con los otros sin causar conflictos en la silabificación de palabras. Sin embargo, como indica Fallows, sólo una forma modificada del principio de ambisilabicidad se puede combinar con el principio de las restricciones al orden de segmentos.

Además del resumen de los principios que rigen la segmentación silábica, Fallows fue una de las primeras personas que investigaron estos mismos principios a través de la silabificación subjetiva llevada a cabo por un número de participantes a un experimento. Primero, se compiló una lista de 71 palabras disílabas inglesas. Para investigar los principios, primero los participantes tenían que repetir cada palabra doblando la primera sílaba y en una segunda tarea tenían que repetir cada palabra doblando la segunda sílaba. El resultado del análisis de cada principio se presenta en la forma de un porcentaje de los casos en el que el principio se aplica. El principio más aplicado es el de las restricciones al orden de segmentos, con un 98%. Esto significa que en el 98% de los casos, las sílabas siguen las mismas reglas que las palabras monosílabas con respecto a los grupos consonánticos permitidos al principio y al final. Los casos en los que el principio no se aplica son palabras en las que, según algunos de los participantes, la segunda sílaba empieza con un grupo consonántico como /vn/, /kn/, /vr/, /ts/ y /nl/ en las palabras evening, picnic, every, pretzel y only, respectivamente. Además, Fallows indica que las palabras con el grupo /st/ medial a menudo se parten por el medio del grupo consonántico y por eso el posicionamiento del grupo al principio o al final de una sílaba se considera una violación de la jerarquía de las consonantes en cuanto a su sonoridad, lo que según Fallows parece indicar que la jerarquía propuesta es incorrecta. Finalmente, se investigaron las restricciones con respecto al uso de vocales relajadas en posición final de la sílaba y resulta que las primeras sílabas con una vocal relajada terminan en una consonante en el 81% de los casos.

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11 Evaluando el trabajo de Fallows, se presentan unos problemas con respecto al análisis de los principios. En primer lugar, aunque el hecho de que los diferentes principios se investigan simultáneamente posibilita la formación de una jerarquía de los principios en cuanto a la fuerza de su influencia, este procedimiento no ofrece la oportunidad de comprender el efecto exacto de los principios individuales, especialmente el efecto de los principios que no se dejan combinar con otros principios sin causar conflictos. Además, existen otras variables no controladas que posiblemente interfieren con el análisis, como el hecho de que las consonantes intervocálicas de algunas de las palabras usadas se escriben con una sola letra mientras que las de otras se escriben con dos letras. La influencia de la información ortográfica sobre tareas que sólo requieren información fonológica se ha demostrado en varias ocasiones (Seidenberg & Tanenhaus, 1979; Jakimik, Cole & Rudnicky, 1985). Aunque en algunas ocasiones Fallows indica que el resultado de la investigación de un principio probablemente está sujeto a la influencia de otro principio, una investigación más controlada ofrecería más seguridad sobre la validez de las concusiones.

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12 Tabla 2. Número medio de formaciones de sílabas V/CC, VC/C y demás con consonantes

posvocálicas obstruyentes, nasales y líquidas.

Mean no. of responses

V/CC VC/C Other Postvocalic obstruents 11.65 4.00 4.35 (5.18) (2.58) (3.72) Postvocalic nasals 8.50 7.65 3.85 (4.77) (3.41) (5.02) Postvocalic liquids 4.15 9.80 6.05 (4.32) (4.46) (3.14)

Note. Standard deviations are in parentheses.

La tabla presenta el número medio de formaciones de cada tipo de sílaba en los tres grupos con la desviación estándar entre paréntesis. Los análisis muestran que la diferencia entre las sílabas V/CC y VC/C es significativa tanto en el grupo de las consonantes obstruyentes, que favorece una sílaba V/CC, como en el de las líquidas, que favorece una sílaba VC/C, mientras que el grupo de las nasales no favorece ninguno de los dos tipos de sílabas. Treiman concluye que estos resultados fallan a favor de la idea de que las consonantes posvocálicas obstruyentes forman parte de la coda de la sílaba, mientras que las líquidas forman parte del núcleo, porque a menudo no se parten de su vocal original. Finalmente, las consonantes posvocálicas nasales ocupan una posición intermedia. Según Treiman, los resultados son compatibles con la noción de que cada consonante tiene cierto rango dentro de una jerarquía con respecto a su sonoridad, que determina su afinidad con la vocal de la sílaba.

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13 proporciones de los resultados V/CC y VC/C entre las diferentes categorías más que la tendencia de cada una de las categorías.

Una de las primeras investigaciones que se apuntó a examinar el efecto de múltiples factores a la vez sobre la segmentación silábica utilizando un solo modelo estadístico es la de Treiman y Danis (1988). Por medio de tres experimentos diferentes se investiga la influencia del acento léxico de la palabra, la categoría de la consonante intervocálica, la tensión de la vocal precedente y la diferencia entre una consonante intervocálica singular y una doble en cuanto a la ortografía. Cada uno de los experimentos consiste en una tarea oral y una escrita. Para la tarea oral, los participantes ingleses tenían que invertir verbalmente el orden silábico de las palabras habladas que se utilizaban como estímulos. Para la tarea escrita, tenían que elegir la mejor opción de dos diferentes silabificaciones escritas de los mismos estímulos. Cada estímulo tenía un fonema crítico y las colocaciones silábicas de los fonemas críticos constituían los datos.

Los datos de la investigación muestran que, en primer lugar, la ortografía de los estímulos tiene un efecto significativo sobre el posicionamiento del fonema crítico tanto en la tarea oral como en la escrita. En la tarea oral, cuando una consonante se deletrea con una letra doble, se pone en ambas sílabas más frecuentemente que cuando se deletrea con una singular. En la tarea escrita, se pone en la primera sílaba más frecuentemente cuando tiene una ortografía doble que cuando la ortografía es singular. En segundo lugar, la influencia del acento léxico resulta significativa en la tarea oral y en la escrita. En la tarea oral, cuando el acento está en la primera sílaba, la consonante se pone en ambas sílabas más frecuentemente que cuando está en la segunda. Además, cuando el acento está en la primera sílaba, la consonante se pone en la primera sílaba más frecuentemente que cuando está en la segunda. Este último resultado también se encontró en la tarea escrita. Además de los efectos principales, se encontró una interacción significativa entre la ortografía y el acento léxico en la tarea escrita: cuando una consonante tiene una ortografía singular, la influencia del acento es mayor que cuando tiene una doble, lo que se atribuye al hecho de que los participantes no tenían la opción de partir las consonantes dobles por el medio.

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14 se pone en la primera sílaba más frecuentemente cuando la vocal precedente es relajada que cuando es tensa. Este último resultado también se encontró en la tarea escrita. Así como entre la ortografía y el acento léxico, se encontró una interacción significativa entre la categoría de la consonante y el tipo de vocal precedente en la tarea escrita.

Cuando se compara la investigación de Treiman y Danis con la de Fallows (1981), la diferencia más importante es el hecho de que Treiman y Danis introducen el factor de la ortografía, que parece tener una influencia innegable. Por otro lado, todos los otros factores ya estaban incluidos de algún modo u otro en el conjunto de principios de Fallows y además, en la investigación de Treiman y Danis los factores muestran una misma polaridad en cuanto a la influencia que ejercen sobre la división silábica como en la de Fallows. En comparación con Fallows, el análisis simultáneo de la influencia de los diferentes factores sobre la división silábica de Treiman y Danis posibilita una interpretación más significativa gracias al uso de modelos estadísticos. Además, esta metodología facilita el análisis de los efectos de interacción entre los diferentes factores.

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15 Figura 2. El tiempo medio en milisegundos que se necesita para detectar una palabra monosílaba CVCC y una CVC en una secuencia con una segunda vocal tensa y una relajada.

Como muestra el diagrama, una elevación de la tensión de la segunda sílaba de la secuencia hace que el tiempo de reacción se retrase cuando el estímulo es una palabra CVCC como mint pero no cuando es una CVC como thin. La conclusión de los investigadores es que la alta tensión provoca una segmentación adelantada, es decir, una inclusión de la última consonante delante de la segunda vocal dentro de la segunda sílaba, que causa el retraso de la detección de una palabra cuando esa consonante forma parte de ella. En otras palabras, la tensión de una vocal atrae las consonantes precedentes.

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16 1.4 Discusión de los desarrollos

Lo que es evidente cuando se evalúan las investigaciones discutidas en las secciones 1.1, 1.2 y 1.3 es que, a través de algunas décadas, ha habido un gran desarrollo en cuanto a la comprensión de la importancia de la sílaba como unidad fonológica, de la complejidad de la segmentación silábica del lenguaje y de los métodos analíticos adecuados para investigar la influencia de los principios y los factores que rigen la segmentación silábica. En primer lugar, se han incluido cada vez más factores en las teorías silábicas y estos factores se han estudiado con cada vez más detalle. Además de las restricciones establecidas a la unidad fonológica de la palabra, a través de los años se han incluido la sonoridad de la consonante, la tensión de la vocal, la posición de la consonante con respecto a la vocal, el acento léxico y la ortografía de la consonante en el conjunto de factores que se supone que influyen en la segmentación silábica. Algunos de estos factores se han reconsiderado, como la sonoridad de la consonante, que se ha argumentado que debería ser reemplazado por una medida del grado de modulación de parámetros acústicos como la amplitud, la periodicidad, la forma espectral y el F0 (Ohala 1992: 334). Otro posible sustituto para la sonoridad de la consonante que no está basado en las propiedades acústicas sería una combinación de la categoría de la consonante, el lugar de su articulación y la diferencia entre una consonante sonora y una sorda. De una manera parecida, la tensión de la vocal en ciertos idiomas en realidad se refiere a una combinación de la centralidad del F1, del F2 y la duración de la vocal.

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18 2. El propósito

El propósito del presente trabajo es investigar la influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica del español3. Aunque el efecto de estos dos factores sobre la segmentación silábica ya se demostró anteriormente en varias ocasiones, casi siempre los datos eran constituidos por una segmentación silábica perceptual. Es decir, la división de palabras en sílabas la solían hacer los participantes a experimentos de silabificación. Sin embargo, esta metodología conlleva unos problemas con respecto a su objetivo. En primer lugar, el proceso de la silabificación siempre resulta en una forma no natural de la palabra en estudio. Por ejemplo, cuando se silabifica la palabra /roxo/, el resultado es una enunciación como /ro||xo/ o /roxoxo/, dependiendo de las instrucciones que reciben los participantes. Esta enunciación no natural podría introducir nuevos factores innecesarios. Además, puede interferir la educación de los participantes en cuanto a la segmentación silábica y en cuanto al significado y la ortografía de las palabras a prueba. Como ya se indicó en la sección 1.3, el conocimiento de la ortografía puede influir en el resultado de tareas que sólo requieren información fonológica.

Sin embargo, en la presente investigación se pretende abordar el problema con un enfoque más directo. Los datos se basarán en una propiedad acústica del habla, concretamente, la duración. Por la investigación del habla original se espera obtener una impresión más transparente de la influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica en español. En otras palabras, no se investigará la segmentación silábica perceptual sino la productiva. Teniendo en cuenta el hecho de que ya se ha demostrado la importancia de la sílaba como unidad fonológica en la sección 1.1, se supone que probablemente la sílaba está involucrada en la producción del habla y que el habla muestra huellas de la segmentación silábica productiva. Por lo tanto, la expectativa es que los factores investigados influyen en la medida en la que una vocal y una consonante contigua están en correlación con respecto a su duración. Es decir, en concordancia con la idea del principio de Maximal Onset que se discutió anteriormente, se espera que, cuando alarga o acorta la duración de una vocal, la duración de una consonante contigua es más imitativo del cambio de duración de la vocal cuando precede que cuando sigue la vocal. Además, en concordancia con lo que hasta ahora se ha observado del efecto del acento léxico, se espera que la duración de una consonante contigua es más imitativo del cambio de duración de la vocal cuando la vocal lleva el acento léxico que cuando no lo lleva. La idea es que los dos factores influyen en la afinidad entre una consonante y una vocal contigua, o en otras palabras, que influyen en la distancia entre el límite silábico y el núcleo silábico

3

El orden fonémico se refiere al mismo concepto que el término de la posición de la consonante con respecto a

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20 3. Corpus y metodología

Para formar un corpus de datos para la investigación de la influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica, se han utilizado once vídeos de YouTube de entrevistas a hablantes nativos del español estándar de España peninsular4. La duración de los videos varía entre 8 y 61 minutos. Todos los vídeos muestran una entrevista a una mujer, salvo uno, en el que se entrevista a dos mujeres a la vez. Además, se ha utilizado el habla de una entrevistadora, así que, en su totalidad, se ha utilizado el habla de trece mujeres españolas con una edad que varía entre 40 y 70 años. En todas las entrevistas se usa un lenguaje informal. El corpus está formado por todos los casos de la enunciación de la secuencia fónica [αtα] en la que los tres fonos se encuentran en la misma palabra, así que se eliminan los efectos del tipo de vocal, del tipo de consonante y de los límites entre palabras. Tampoco hay un efecto de la ortografía visto que la ortografía de [t] en español siempre es singular. Además, no hay ningún efecto de la tensión de la vocal por el hecho de que el fonema /a/ en español siempre se pronuncia como [α]. Finalmente, se han excluido todos los datos que originan en préstamos lingüísticos.

El proceso de la recogida de los datos era así: primero, el audio de cada uno de los vídeos se convirtió a un archivo WAV mediante el sitio web de Office-Converter.com5. Este archivo se abrió en Praat (Boersma & Weenink, 2013) para buscar todos los casos de la enunciación de la secuencia fónica [αtα] en la que los tres fonos se encuentran en la misma palabra. De estos casos se excluyeron los que no tenían una pronunciación clara y los que eran precedidos o seguidos por una vocal o una consonante demasiado asimilada a la vocal contigua, porque dificultaban la demarcación de los límites de los tres fonos. La demarcación de estos límites se hizo en Praat. Los límites se basaron en los cambios de los armónicos del sonido visible en el oscilograma. Cada límite se puso al principio de una onda sonora en la posición del cruce por cero. La necesidad de la demarcación de los límites fue la razón de la elección de [α] como vocal: resultó que [α] es la vocal que se pronunciaba con más fuerza y por lo tanto era fácil demarcar sus límites. La consonante [t] se ha elegido por la misma razón, visto que es una de las consonantes menos fuertes.

Después de la demarcación de los límites, con cada fono se anotó su signo fónico correspondiente con la presencia o ausencia del signo diacrítico del acento léxico y su duración en milisegundos. En la figura 3 se muestra un ejemplo del resultado de este proceso:

4

En la sección 8.1 se encontrará información básica sobre los vídeos de YouTube y los enlaces a ellos.

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21 Figura 3. Oscilograma de la pronunciación de la palabra cátaros con la demarcación de los límites de los fonos y la anotación del signo fónico, del acento léxico y de la duración en milisegundos en Praat.

Para cada [α] y la [t] de una secuencia [αtα], la duración se insertó en una base de datos en IBM SPSS Statistics 20. Además, se insertaron la posición de cada [α] con respecto a la [t] y la presencia o ausencia del acento léxico en ella. Después, todas las duraciones se normalizaron con respecto a la velocidad de habla de los sujetos. Primero, se determinó la velocidad de habla de cada uno de los sujetos en base al promedio de tres cálculos del número de sílabas enunciadas por segundo en una parte de habla continua de aproximadamente 10 segundos. Todas las velocidades de habla caían entre 5,5 y 6,5 sílabas por segundo. Luego, para cada sujeto se dividió el número 7 por su velocidad de habla6. Finalmente, todas las duraciones del sujeto se dividieron por el resultado de este cálculo y se redondearon a milisegundos enteros para obtener la duración normalizada. Así, se ha eliminado el efecto de las velocidades de habla de los sujetos. La duración normalizada de los tres fonos de cada secuencia [αtα] es la variable de la duración definitiva que se utilizará en los análisis7.

6 El número 7, que se eligió arbitrariamente, es una constante que se necesita para poder normalizar las

duraciones de cada sujeto.

7 En la sección 8.2 se podrá observar el corpus de los datos que se analizarán.

k á t a r o s

57 ms 54 ms 64 ms

Time (s)

0 0.4579

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22 4. Los análisis

En esta sección se tratarán los resultados de la investigación de la influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica. Primero, se discutirá la clasificación de categorías de datos que se hará en base a estos dos factores. Después, se investigará el efecto de las variables de la posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada, la tonicidad de la vocal focalizada y la tonicidad de la vocal opuesta.

4.1 Las variables y el método analítico

El objetivo del presente trabajo es investigar el efecto del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica. Aunque el análisis del efecto del orden fonémico se centra en una sola variable de la posición de la consonante con respecto a una vocal contigua, el efecto del acento léxico se investigará a través de dos variables diferentes. La primera de estas dos variables es la tonicidad de la vocal cuya duración se correlaciona con la duración de la consonante contigua. A esta vocal se referirá como la vocal focalizada. La segunda variable es la tonicidad de la vocal al otro lado de la consonante, que se denominará la vocal opuesta. El motivo para incluir esta segunda variable es el hecho de que, si se supone que la tonicidad de una vocal influye en la afinidad que tiene la vocal con una consonante contigua, la tonicidad de la vocal opuesta tendrá el efecto inverso, suponiendo que los límites de sílabas contiguas son interdependientes. Puesto que ambas variables tienen que ver con el acento léxico, ambas se analizarán.

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23 Tabla 3. La clasificación de las categorías de datos basadas en la posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada, la tonicidad de la vocal focalizada y la tonicidad de la vocal opuesta.

Tonicidad de la vocal

focalizada Tónica Átona

Tonicidad de la vocal opuesta Tónica Átona Tónica Átona

Posición de la consonante Prevocálica 1 -- -- 3 32 tratar 5 36 tratan 7 39 plataforma Posvocálica 2 -- -- 4 36 tratan 6 32 tratar 8 39 plataforma

Como se observa en la tabla, cada categoría se ha numerado y para cada categoría se muestra el número de entradas de datos en SPSS. Además, para cada categoría se da un ejemplo de una palabra que pertenece a esa categoría, con la vocal focalizada subrayada. Visto que no existen palabras con dos acentos léxicos, no hay ejemplos de las categorías 1 y 2. Sin embargo, las otras seis categorías se usarán para investigar el efecto de las tres variables. Para investigar el efecto de la posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada, se comparará la categoría 3 con 4, 5 con 6 y 7 con 8. Para investigar el efecto de la tonicidad de la vocal focalizada, se comparará la categoría 3 con 7 y 4 con 8. Finalmente, para investigar el efecto de la tonicidad de la vocal opuesta, se comparará la categoría 5 con 7 y 6 con 8. A través de la combinación de estas categorías se llegará a un solo valor p con el que se determinará el efecto de la variable en cuestión.

4.2 La posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada

(24)

24 correlación significa que cuando alarga la duración de la vocal focalizada, también alarga la duración de la consonante y que cuando acorta la duración de la vocal focalizada, también acorta la duración de la consonante. Los resultados de las correlaciones de las categorías 3 y 4 y su comparación se muestran en la tabla 4:

Tabla 4. Los resultados de las correlaciones de las categorías 3 y 4 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

3 - tratar .510 32 .003

1.17378916 .240

4 - tratan .258 36 .129

En la tabla se observan el número de la categoría con un ejemplo con la vocal focalizada subrayada, el coeficiente de correlación r, el tamaño de la muestra n y el valor p para cada una de las correlaciones. Además, se muestran el valor z resultante de la comparación de los dos valores r y el valor p de la diferencia entre ellos. En primer lugar, el valor r de ambas categorías es positivo, lo que significa que en ambas categorías hay una relación positiva entre la duración de la consonante y la vocal focalizada. Mientras que la correlación de la categoría 3 es significativa (p = .003), la correlación de la categoría 4 no es significativa (p = .129)8. Esto significa que la correlación entre la duración de la consonante y la de la vocal focalizada es significativa cuando el acento léxico está en la vocal focalizada y la consonante es prevocálica pero no cuando es posvocálica. Sin embargo, la diferencia entre los valores r no es significativa (p = .240). Por lo tanto, todavía no se puede constatar un efecto significativo de la posición de la consonante para esta pareja de categorías.

La segunda pareja de categorías relevante para la investigación del efecto de la posición de la consonante es la de las categorías 5 y 6. En estas categorías el acento léxico está en la vocal opuesta. Los resultados de sus correlaciones y la comparación entre ellas se observan en la tabla 5:

(25)

25 Tabla 5. Los resultados de las correlaciones de las categorías 5 y 6 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

5 - tratan .524 36 .001

1.32008699 .187

6 - tratar .241 32 .185

Como muestra la tabla, otra vez hay una correlación significativa en la primera de las dos categorías (p = .001) y otra vez la correlación de la segunda categoría no es significativa (p = .185), lo que significa que la correlación es significativa cuando el acento léxico está en la vocal opuesta y la consonante es prevocálica pero no cuando es posvocálica. De nuevo, la diferencia entre los valores r no es significativa (p = .187), así que otra vez no se ha encontrado un efecto significativo de la posición de la consonante.

La tercera y última pareja consiste en las categorías 7 y 8, en las que ninguna de las dos vocales lleva el acento léxico. Sus resultados se muestran en la tabla 6:

Tabla 6. Los resultados de las correlaciones de las categorías 7 y 8 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

7 - plataforma -.141 39 .394

-0.14651764 .884

8 - plataforma -.107 39 .519

Los resultados de la última pareja de categorías muestran unas diferencias claras con los resultados de las otras dos parejas. En primer lugar, contrario a la expectativa, la correlación entre la duración de la consonante y la de la vocal focalizada es negativa. Además, no se ha encontrado una correlación significativa en la categoría 7 (p = .394) ni tampoco en la categoría 8 (p = .519). Por eso, cuando ninguna de las dos vocales lleva el acento léxico, la correlación no es significativa tanto cuando la consonante está en posición prevocálica como cuando está en posición posvocálica. Finalmente, la diferencia entre los valores r no es significativa (p = .884), lo que significa que de nuevo no se ha encontrado un efecto significativo de la posición de la consonante.

(26)

26 dirección en las tres parejas, es decir, el efecto de la primera categoría es más fuerte que el de la segunda, y se ha usado el promedio de las dos categorías de cada pareja para indicar el tamaño de la muestra. El valor p de .145 significa que no se ha encontrado un efecto significativo de la posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada.

4.3 La tonicidad de la vocal focalizada

La segunda variable que se investigará es la tonicidad de la vocal focalizada. Para ello, se compararán las parejas de las categorías de la tabla 3 entre las que sólo cambia la tonicidad de la vocal focalizada. La primera pareja es la de las categorías 3 y 7. En estas categorías, la consonante es prevocálica y la vocal opuesta es átona. La hipótesis con respecto a esta variable es que la correlación entre la duración de la consonante y la de la vocal focalizada es más fuerte cuando la vocal focalizada es tónica que cuando es átona. Los resultados de las correlaciones de las categorías 3 y 7 y su comparación se observan en la tabla 7:

Tabla 7. Los resultados de las correlaciones de las categorías 3 y 7 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

3 - tratar .510 32 .003

2.82411731 .005

7 - plataforma -.141 39 .394

Como ya se mostró en la tabla 4, la correlación de la categoría 3 es significativa. Sin embargo, aunque la diferencia entre la correlación de la categoría 3 no diferenciaba significativamente de la correlación de la categoría 4, la tabla 7 muestra una diferencia significativa entre las categorías 3 y 7 (p = .005). Por eso, hay que concluir que el efecto de la tonicidad de la vocal focalizada es significativo cuando la consonante es prevocálica.

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27 Tabla 8. Los resultados de las correlaciones de las categorías 4 y 8 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

4 - tratan .258 36 .129

1.54098086 .123

8 - plataforma -.107 39 .519

La tabla muestra que ninguna de las correlaciones de las dos categorías es significativa. Además, tampoco resulta significativa la diferencia entre las categorías (p = .123), lo que significa que el efecto de la tonicidad de la vocal focalizada no es significativo cuando la consonante es posvocálica.

No obstante, otra vez se pueden combinar los resultados de las comparaciones de las categorías mediante MetaP. La combinación de los valores p de las comparaciones produce un resultado final significativo (p = .002) según el cálculo de Stouffer’s z trend. Por eso, la conclusión es que el efecto de la tonicidad de la vocal focalizada es significativo.

4.4 La tonicidad de la vocal opuesta

(28)

28 Tabla 9. Los resultados de las correlaciones de las categorías 5 y 7 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

5 - tratan .524 36 .001

3.00325664 .003

7 - plataforma -.141 39 .394

Aunque ya se ha visto que la correlación de la categoría 5 es significativa y la de la categoría 7 no es significativa, el análisis de la diferencia entre las dos categorías produce un resultado significativo (p = .003). Esto podría significar que el efecto de la tonicidad de la vocal opuesta es significativo cuando la consonante se encuentra delante de la vocal focalizada. Sin embargo, la correlación entre la duración de la consonante y la de la vocal focalizada es más alta cuando la vocal opuesta es tónica que cuando es átona. Esto quiere decir que la dirección del efecto va en contra del efecto del acento léxico que se suele observar. Por otro lado, los resultados podrían indicar que el orden fónemico es más influyente que el acento léxico.

El efecto de la misma variable se investigará cuando la consonante es posvocálica con la comparación de las categorías 6 y 8. Los resultados de esta comparación se muestran en la tabla 10:

Tabla 10. Los resultados de las correlaciones de las categorías 6 y 8 y su comparación.

Correlaciones Diferencia

r n p z p

6 - tratar .241 32 .185

1.41570139 .157

8 - plataforma -.107 39 .519

Los resultados muestran la falta de significancia de las correlaciones de las categorías comparadas, que ya se determinó antes. Además, tampoco resulta significativa la diferencia entre ellas (p = .157). Por eso, el efecto de la tonicidad de la vocal opuesta no es significativo cuando la consonante es posvocálica.

(29)

29 5. Discusión

En la sección 4 se investigó la influencia del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica productiva del español. En esta sección se discutirá la influencia de cada uno de los factores y las implicaciones de los resultados para la segmentación silábica.

La hipótesis principal en la que se ha basado la presente investigación era que los factores del orden fonémico y del acento léxico influyen en la medida en la que una vocal y una consonante contigua están en correlación con respecto a su duración. Esta hipótesis ha llevado a un experimento con las tres variables de la posición de la consonante con respecto a la vocal focalizada, la tonicidad de la vocal focalizada y la tonicidad de la vocal opuesta. En base a estas variables, se ha hecho una clasificación de seis categorías utilizables para el experimento y para cada una de ellas se ha hecho una correlación entre la duración de la consonante y la de la vocal focalizada. Aunque la mayoría de estas correlaciones ha resultado en un coeficiente de correlación positivo, los coeficientes de las correlaciones de las categorías 7 y 8 de la tabla 3 tienen una dirección negativa.

Para las tres variables, las hipótesis eran que la correlación entre la duración de la consonante y la de la vocal focalizada es más fuerte cuando la consonante es prevocálica que cuando es posvocálica, que esta misma correlación es más fuerte cuando la vocal focalizada es tónica que cuando es átona y que es más fuerte cuando la vocal opuesta es átona que cuando es tónica si el orden fonémico no es más influyente en la segmentación silábica del español que el acento léxico. De estas hipótesis sólo se ha cumplido la segunda, mientras que para la última variable se ha encontrado un efecto significativo pero con una dirección opuesta a la que se había esperado.

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30 existen huellas de la segmentación silábica productiva. Sin embargo, hay unas claras diferencias entre la presente investigación y el segundo experimento de Cutler y Norris, como el hecho de que los factores investigados, las metodologías y los métodos analíticos son diferentes. Tal vez la existencia de huellas de la segmentación silábica productiva sólo se revele cuando se comparan las correlaciones entre las duraciones de fonos contiguos. Desafortunadamente, en este momento es difícil sacar una conclusión definitiva. Otras investigaciones de la existencia de huellas de la segmentación silábica productiva son necesarias para poder confirmar que los resultados significativos de los factores investigados realmente están relacionados con la segmentación silábica. Además, la significancia y la dirección del efecto de los factores se pueden comparar con los resultados que se han obtenido mediante los experimentos de la segmentación perceptual a través de la silabificación subjetiva del lenguaje. En primer lugar, no se ha encontrado un efecto significativo del orden fonémico. En otras palabras, la posición de la consonante con respecto a una vocal contigua no parece afectar su afinidad con esta vocal. Este resultado es sorprendente visto que el factor del orden fonémico siempre ha estado presente en las teorías silábicas en la forma de principios como los de Maximal Onset y Obligatory Onset. Sin embargo, es difícil hacer generalizaciones, porque sólo se han investigados los casos con una consonante [t]. En teoría se podrían obtener resultados diferentes si se utilizara una consonante que se considere menos restringida por las reglas fonotácticas de las palabras. Por otro lado, en general estas mismas reglas fonotácticas dicen que la consonante [t] sólo puede preceder y no seguir una vocal en español. Esto significa que el uso de otras consonantes menos restringidas que [t], como [n], que según las reglas fonotácticas se permite tanto delante de una vocal como detrás de ella, probablemente contrariaría la observación del efecto habitual del factor del orden fonémico más que el uso de [t], así que el efecto final del orden fonémico sería aún menos visible que en la presente investigación. Por eso, podría ser difícil confirmar la validez de este factor en la segmentación silábica productiva.

(31)

31 No obstante, los resultados posibilitan otra interpretación: tanto el efecto de la tonicidad de la vocal focalizada como el de la tonicidad de la vocal opuesta es significativo sólo cuando la consonante es prevocálica. Esto podría significar que la tonicidad de una sílaba afecta su propio ataque y el ataque de la sílaba a la derecha pero no su propia coda ni la coda de la sílaba a la izquierda. Sin embargo, esta interpretación implicaría que una propiedad de una vocal puede afectar el ataque de la sílaba a la derecha sin afectar su propia coda y que puede afectar la coda de la sílaba a la izquierda sin afectar su propio ataque y este tipo de efecto sólo es posible si los límites de sílabas contiguas no se afectan bajo la influencia de la propiedad en cuestión. Además, esta idea va en contra del principio de la tonicidad más aceptado que se formuló en Fallows (1981), que dice que las vocales tónicas atraen el máximo número posible de consonantes tanto al ataque como a la coda de la sílaba. Por eso, ninguna de las dos interpretaciones discutidas hasta ahora parece muy lógica.

(32)

32 6. Conclusión

El objetivo del presente trabajo ha sido investigar el efecto del orden fonémico y del acento léxico sobre la segmentación silábica a través del análisis del aspecto acústico de la duración. Las hipótesis que se habían formulado en cuanto al efecto de estos factores sólo se han cumplido parcialmente. Esto significa que se han encontrado unas grandes diferencias entre los resultados de la presente investigación y los de investigaciones anteriores de la segmentación silábica. La explicación más obvia sería el hecho de que la presente investigación se centra en la segmentación silábica productiva y no en la perceptual. Aunque la existencia de huellas de la segmentación silábica productiva por lo menos se parece haber comprobado, según los resultados los principios que la rigen a primera vista no incluyen todos los factores comúnmente aceptados, como el orden fonémico. Además, aunque la tonicidad de la vocal mostró el efecto habitual sobre la afinidad de su propia vocal con las consonantes contiguas, tenía el mismo efecto sobre la afinidad de las mismas consonantes con la vocal opuesta, lo que va en contra de las expectativas en cuanto al efecto del acento léxico y la manera de la que los límites de sílabas contiguas se afectan, a menos que se suponga que, en el caso de una consonante intervocálica [t], el orden fonémico es más influyente en la segmentación silábica del español que el acento léxico. No obstante, parece que hay grandes diferencias entre la segmentación silábica perceptual y la productiva.

Se debe indicar que el método analítico que se ha tenido que utilizar para investigar la segmentación silábica productiva es demasiado intricado. Una investigación como la presente podría beneficiarse mucho del desarrollo de un modelo estadístico que permita la investigación del efecto de las variables categóricas investigadas a través del análisis de su efecto de interacción sobre la correlación de las duraciones de una vocal y una consonante contigua. Tal método analítico sería más eficiente y posiblemente más precisa que el que se ha utilizado en la presente investigación. Además, el uso de un solo modelo estadístico haría posible el análisis exacto de los efectos de interacción entre las variables investigadas y la diferencia entre las fuerzas de sus efectos principales, lo que en el presente trabajo no se ha logrado hacer debido al hecho de que se hubieran tenido que comparar los valores p resultantes de las comparaciones de los coeficientes de las correlaciones, lo que no es una manera válida para obtener resultados conclusos (Matthews & Altman, 1996: 808).

(33)

33 principios establecidos a través de la silabificación del lenguaje por múltiples personas o en otras propiedades acústicas del habla como el volumen, que se ha utilizado en algoritmos como el presentado por Mermelstein (1975).

(34)

34 7. Bibliografía

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(35)

35 Real Academia Española (2001), Diccionario de la Lengua Española, Madrid: Espasa.

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(36)

36 8. Apéndices

8.1 Los vídeos fuentes del corpus

- Vídeo 1: Entrevista a Koro Castellano, Head of Kindle en Amazon España. Fuente: weblogssl (2007),

https://www.youtube.com/watch?v=ApgZt1D3n20, 01-11-2014. - Vídeo 2: Entrevista a Itziar Aguirre. Fuente: Equo Sevilla (2011),

https://www.youtube.com/watch?v=VICKSO3chSM, 01-11-2014.

- Vídeo 3: Periodista Digital entrevista a Isabel Gemio y M.J. Álava, “Aprende a ser feliz” –sept. 2011. Fuente: periodistadigital (2005),

https://www.youtube.com/watch?v=gpHa8by6LYI, 01-11-2014. - Vídeo 4: Ser Líder: Entrevista a Elsa Punset. Fuente: BiiALab (2005),

https://www.youtube.com/watch?v=whhINilYfUM, 01-11-2014.

- Vídeo 5: Entrevista a Inmaculada Gil, directora general de Daiichi-Sankyo España. Fuente: pmfarma (2009),

https://www.youtube.com/watch?v=cx_qvuGZSM0, 01-11-2014.

- Vídeo 6: Corazón Alado – Entrevista a Montse Puchol – Filósofa y Escritora – La nueva educación. Fuente: Corazón Alado (2009),

https://www.youtube.com/watch?v=k18u7zgQlbo, 01-11-2014.

- Vídeo 7: Galicia Opina 11 Abril entrevista Covadonga O’Shea. Fuente: PopularTv Galicia (2010),

https://www.youtube.com/watch?v=T0Vpp9yBUeU, 01-11-2014.

- Vídeo 8: Pilar Rahola en TV de USA – CNN en Español. Fuente: VideosCohen (2012),

https://www.youtube.com/watch?v=QWn1SnAWKCA, 01-11-2014.

- Vídeo 9: Entrevista a Isabel Moreno, experta en dietas y nutrición macrobiótica en SHA. Fuente: informativos (2006),

https://www.youtube.com/watch?v=QGNb8pK2l54, 01-11-2014. - Vídeo 10: El movimiento cátaro. Fuente: TDSCanalCatala (2008),

https://www.youtube.com/watch?v=ykYNo1PdmC8, 01-11-2014.

- Vídeo 11: PD entrevista a Pilar Rahola, autora de “La república islámica de España” -mayo 2011-. Fuente: periodistadigital (2005),

(37)

37 8.2 El corpus

Tabla 11. El corpus de datos con el número del vídeo fuente, el número del sujeto, la palabra investigada, la duración de la vocal focalizada en milisegundos, la duración de la consonante en milisegundos, la posición de la consonante (1=posvocálica,

2=prevocálica), la tonicidad de la vocal focalizada (1=tónica, 2=átona) y la tonicidad de la vocal opuesta (1=tónica, 2=átona).

Vídeo fuente

Sujeto Palabra Duración

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38 Vídeo

fuente

Sujeto Palabra Duración

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39 Vídeo

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Sujeto Palabra Duración

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Sujeto Palabra Duración

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43 Vídeo

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Sujeto Palabra Duración

Referenties

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