Entre aromas de incienso y pólvora: Los Altos de Jalisco, México, 1917-1940
López Ulloa, J.L.
Citation
López Ulloa, J. L. (2008, November 5). Entre aromas de incienso y pólvora: Los Altos de Jalisco, México, 1917-1940. Retrieved from https://hdl.handle.net/1887/13225
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1. La confrontación entre la Iglesia y el Estado en el México posrevolucionario tuvo la misma raíz de los conflictos que se vivieron durante la Reforma en el siglo XIX. En ambos casos, a la intención del gobierno de modernizar el país, los sectores más tradicionalistas respondieron de manera violenta y en ambos casos se produjo una guerra civil que involucró a grandes sectores de la población.
2. La intensidad con que se vivió el conflicto entre el gobierno revolucionario y los católicos mexicanos se tradujo en una ruptura permanente entre la sociedad, llegando a polarizar las posiciones, lo que se reflejó en las divisiones internas que se observaron a lo largo de todo el siglo XX y que se tradujeron en sendos problemas sociales, políticos y económicos entre los mexicanos.
3. El enfrentamiento entre el gobierno revolucionario y los sectores más tradicionalistas de la sociedad mexicana que se opusieron a la normatividad constitucional, era, en último de los casos, la confrontación entre dos cosmogonías.
4. El episcopado mexicano, a partir de los criterios de la llamada doctrina social católica estableció organizaciones de feligreses con la doble pretensión de divulgar el pensamiento católico y de ampliar su presencia en el espacio social.
5. La reglamentación relativa a la materia educativa fue objeto del rechazo de una gran cantidad de alteños, porque a su juicio, lo que el Estado pretendía era apropiarse de la conciencia de los niños.
6. El episcopado mexicano reiteradamente señalaba su oposición a la resistencia armada llevada a cabo por los católicos que combatieron al gobierno federal, pero implícitamente consintieron en que tomaran las armas, lo que derivó en el conflicto conocido como la guerra cristera.
7. La historiografía cristera, especialmente la que fue escrita por los actores, refiere que el apoyo que recibieron los combatientes católicos fue absoluto en la región alteña, sin embargo, entre la población de Loa Altos de Jalisco había muchos que apoyaban al gobierno federal, incluso tomando las armas para combatir al ejército cristero.
8. Los obispos no asumieron ante los conflictos una actitud homogénea, lo que se reflejó en que en las diferentes circunscripciones eclesiásticas del país, la feligresía adoptó una gran diversidad de actitudes ante el conflicto.
9. La historiografía, especialmente la que se encuentra escrita a manera de memorias y que fue realizada por los actores, ha construido en el imaginario de la sociedad alteña la equívoca idea de que la fase armada del conflicto entre la Iglesia y el Estado que se conoce como guerra cristera, se vivió únicamente en Los Altos de Jalisco.
10. El conflicto entre la Iglesia y el Estado que se vivió en México a raíz de la promulgación de la Constitución de 1917, se ha convertido en un elemento clave en el proceso de reafirmación de la identidad alteña.
11. Las memorias escritas por los actores, las opiniones vertidas desde el púlpito por los sacerdotes acerca del conflicto cristero y las ideas que los católicos tenían acerca de su relación con Dios posibilitaron la construcción del mito épico de la guerra cristera.
